
La Terapia Gestalt ha sido clave en mi proceso de autoconocimiento y transformación personal. La vida está llena de momentos en los que nos sentimos desconectadosLa vida está llena de momentos en los que nos sentimos desconectados de nosotros mismos, de los demás o incluso de lo que realmente deseamos. Al menos así estaba yo antes de iniciar mi proceso terapéutico. No entendía nada, y la vida era un devenir de frustración y cosas que se me escapaban.
Mi camino hacia la Gestalt
En este camino de descubrimiento personal, pasé por varios procesos. Comencé terapia, empecé a practicar yoga y empecé a estar más en contacto conmigo misma. Descubrí, gracias a Raquel, el vínculo terapéutico y a mi amiga Graciela lo que es la Gestalt. A partir de ahí, no pude parar de querer saber más en este camino del conocimiento personal en el que llevo años.
El aprendizaje a través de la literatura
Así comencé a leer, escuchar pódcast y a adentrarme más profundamente en este enfoque. Recuerdo que viajé con un par de libros de Joan Garriga por el sudeste asiático, y en las noches sin electricidad, con mi linterna, me acompañaban sus palabras. Desde luego, para empezar, Joan es el mejor. Su enfoque didáctico y su lenguaje claro me encantaron. En ese viaje leí y releí cada una de sus palabras, masticándolas tanto que todavía, a día de hoy, siento que forman parte de mí.
Principios de la Terapia Gestalt
La conciencia plena y el «aquí y ahora»
La Gestalt se distingue por su enfoque holístico, en el que se busca una integración de la mente, el cuerpo y las emociones. Según Fritz Perls, uno de los padres fundadores, la clave de este enfoque es la conciencia plena, es decir, vivir el presente y estar completamente en contacto con lo que está sucediendo en el aquí y ahora.
A través de este proceso, logramos reconocer y experimentar nuestras emociones, pensamientos y reacciones en tiempo real, liberándonos de patrones automáticos que a menudo nos limitan. Poco a poco fui diferenciando mandatos sociales o familiares y descubriendo mi propia necesidad. Sigo en ello, para qué engañarnos.
La responsabilidad personal en la Gestalt
La Gestalt también hace énfasis en la importancia de la responsabilidad personal, un concepto clave introducido por Fritz Perls. Nos invita a hacernos cargo de nuestros propios insights dándoles un espacio en el aquí y el ahora.
El concepto de campo en la terapia Gestalt
En el contexto de la Gestalt, el concepto de campo también juega un papel crucial. Según este modelo, las personas no existen de manera aislada, sino que son el resultado de una interacción constante con su entorno. Paco Peñarubia señala que «la salud emocional no solo depende de lo que sentimos, sino de cómo nos relacionamos con el mundo que nos rodea». Esto significa que nuestras emociones y comportamientos están profundamente influidos por el contexto en el que nos encontramos.
Mi experiencia con la Terapia Gestalt
A lo largo de mi formación en Equipo Centro, y bajo la guía de grandes maestras como María Morales y Olga de Miguel, pude vivenciar cómo este enfoque terapéutico va más allá de la simple charla. La Gestalt se vive, se experimenta, se supura. A través de ejercicios vivenciales, se nos enseña a estar presentes, a observar y sentir nuestras reacciones en el momento, a aprender de nuestra corporalidad y emociones, y a abrirnos a nuevas posibilidades.
La Gestalt y otras prácticas de autoconocimiento
Yoga y Gestalt: dos caminos complementarios
Al igual que otras prácticas de autoconocimiento, como el yoga y la meditación, la Gestalt promueve la conexión cuerpo-mente. A través de la atención plena, la terapia Gestalt nos invita a reconocer las sensaciones corporales y a comprender cómo nuestras emociones y pensamientos se manifiestan físicamente.
La importancia del grupo terapéutico
Es importante señalar que la Gestalt no es un proceso que se haga en solitario. Como mencionan tanto Paco Peñarubia como otros teóricos, el trabajo en grupo es fundamental. El grupo terapéutico, tal y como lo describe en su libro «Círculo y Centro: el grupo gestáltico», ofrece un espacio de apoyo y exploración mutua donde las personas se sienten acompañadas y comprendidas.
Reflexión final
Finalmente, para mí, la Gestalt invita a disfrutar de una vida más auténtica y responsable, centrada en la experimentación del presente y la liberación de los bloqueos emocionales y físicos. Nos recuerda que la vida es un proceso continuo de descubrimiento y aprendizaje, y que, al asumir nuestra responsabilidad y estar plenamente presentes, podemos vivir de una manera más rica, equilibrada y satisfactoria.
Post escrito por Mar Sierra