La agresividad y la ternura forman parte de nuestra experiencia vital, solo experimentando una de ellas podemos llegar a vivenciar la otra.

La agresividad es una emoción que no implica violencia sino es una herramienta para poner límites, defendernos y empoderarnos. Trabajaremos para identificar, sentir, canalizar y expresar la rabia y la ternura. Sólo atravesando y permitiéndonos vivenciar una emoción seremos capaces de experimentar en su totalidad la otra.

Dirigido a todas aquellas personas que estén o hayan estado en proceso terapéutico o interesadas en ello. Trabajaremos a través de la palabra y la escucha, la expresión corporal y técnicas que fomenten la creatividad, entre otros.

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